Muchos errores médicos que ocurren en hospitales cada año tienen lugar durante el traspaso de los pacientes. Según un nuevo estudio, muchos errores médicos que ocurren en los hospitales estadounidenses cada año pueden reducirse mejorando la comunicación para optimizar los procedimientos de traspaso de pacientes.

El estudio fue publicado recientemente en The Journal of the American Medical Association y determina que, en muchas oportunidades, la falta de comunicación durante estos procedimientos de traspaso es la responsable de errores médicos posiblemente serios. El estudio señala que la mala comunicación entre los proveedores y los miembros del personal causa errores médicos y, muy seguido, estos errores pueden ser lo suficientemente serios como para comprometer la seguridad del paciente. El equipo de investigación, formado por médicos del Hospital de Niños de Boston, diseñó un sistema de traspaso de pacientes innovador y especial a fin de reducir el riesgo de errores durante los cambios de turno. Este sistema de traspaso incluyó una comunicación mejor normalizada y capacitación sobre la transferencia de pacientes para el personal, un mnemónico verbal y una nueva estructura de transferencia de pacientes.

Los investigadores concluyeron que es muy común que los médicos no se encuentren adecuadamente capacitados en comunicación y prácticas de traspaso, aunque se trata de un momento de alto riesgo para que ocurran errores médicos. El nuevo sistema incluyó un taller interactivo para los clínicos en el que los médicos fueron capacitados para recibir y realizar traspasos en diferentes circunstancias. Los médicos también tuvieron que aprender mnemónico para cerciorarse de que toda la información pertinente se haya comunicado verbalmente durante el traspaso. Los participantes también tuvieron que participar en traspasos cara a cara estructurados para reducir las interrupciones y distracciones que incrementaron el riesgo de la mala comunicación durante los traspasos.

Al utilizar este sistema nuevo y optimizado, los investigadores se dieron cuenta de que podían reducir el número de omisiones que ocurrieron durante el traspaso de pacientes y esto también llevó a una baja del 45.8% del número de errores médicos.