Desde 2011, muchos médicos residentes se han estado beneficiando de tener menos horas de trabajo, ya que surgieron preocupaciones acerca de que la fatiga de los médicos residentes pudiera estar causando errores médicos. Sin embargo, un análisis de los datos conocidos desde entonces parece indicar que la reducción de las horas de trabajo de los médicos en formación no necesariamente mejora la seguridad del paciente ni reduce el número de errores médicos.
En 2003, el Consejo de Acreditación para la Educación Médica de Posgrado (Accreditation Council for Graduate Medical Education) resolvió que los médicos en formación podían trabajar un máximo de 24 horas consecutivas. En 2011, las reglamentaciones recortaron aun más esa cantidad de horas.
Sin embargo, se han publicado nuevos datos en el JAMA Internal Medicine Journal acerca de que los médicos, que trabajan menos horas, no necesariamente reportan menos errores. De hecho, estos residentes cometen más errores y lo que es aun más sorprendente es que informan que no duermen lo suficiente. Muchos residentes también están reportando síntomas de depresión.
Los investigadores han estado analizando por qué reducir las horas no ha contribuido a disminuir los errores médicos, y la explicación parece bastante simple para los abogados de mala praxis médica de California. En muchos hospitales, la disminución de las horas de trabajo de los médicos residentes no ha estado acompañada por el incremento del horario de otros miembros del personal para equilibrar la carga de trabajo. Esto significa que los médicos han reducido las horas de trabajo solamente en teoría y se les pide cumplir con todos sus deberes en menos horas.
Eso ha llevado a comprimir el trabajo, por lo cual los médicos deben completar más tareas en menor cantidad de horas, lo que lleva a síntomas de fatiga y estrés. Estos médicos están en riesgo de sufrir agotamiento y depresión.
Otra teoría es que ha aumentado el número de transferencia de tareas, ya que los médicos dejan su servicio y entregan la atención de sus pacientes a otro médico. Este es un momento crítico en el sistema de cuidado de la salud y muchos errores médicos ocurren durante este período.
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